Sur de Córdoba

En el mes de marzo iniciamos nuestras visitas del 2022. El primer lugar en el que estuvimos fue el sur del departamento de Córdoba, caracterizado por ser una reserva forestal en gran parte del territorio.
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La subregión PDET del Sur de Córdoba está conformada por cinco municipios de este departamento. Allí estuvimos en el mes de marzo conociendo a la comunidad y a quienes lideran la implementación del Acuerdo de Paz de manera territorial en esta zona del país. 

En el Sur de Córdoba la disputa armada no se desarrolla con la misma intensidad que en otras zonas del país, sin embargo, la presencia de grupos armados al margen de la ley sí ha sido un escenario de riesgo que, en unión con otras problemáticas de la región, ha retrasado la implementación del Acuerdo. 

Aquí, la Reforma Rural Integral, columna vertebral del Acuerdo de Paz, ha avanzado de manera muy lenta, tanto en la ejecución de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial como en la formalización y legalización de tierras productivas.

En el Sur de Córdoba sólo 549,93 hectáreas de tierra han sido entregadas a campesinos sin tierra o con tierra insuficiente.

Para las campesinas y los campesinos que habitan en esta subregión es de mayor preocupación las dificultades para acceder a tierras, pues además de los ya mencionados retrasos en la implementación del Acuerdo se le suma que esta región tiene una característica particular: El 38% del área total del territorio está constituida como Parque Nacional Natural. 

Tal como nos lo contó Susan García, una lideresa de mujeres de la región: 

“Nosotros vivimos en la Ley Segunda y en Parques Nacional, donde el Estado no garantiza el acceso a tierras. Vivimos también en zona donde está la electrificadora de Urrá, donde no dicha entidad no nos permite que nosotros podamos sembrar”

La Ley Segunda de 1959 establece los límites territoriales de lo que se conformaría como reserva forestal, que son zonas de alta presencia de biodiversidad, en donde por su especial cuidado no sería posible ni la vivienda, ni las siembras de cultivos, ni la construcción de obras de infraestructura. 

Y el Nudo de Paramillo es un parque nacional natural de un extensión de 504.014 hectáreas de tierra que abarca municipios de Antioquia y Córdoba y que representa el 4% del territorio nacional. 

El habitar en estos dos espacios naturales ha impedido que campesinas y campesinos cordobeses tengan la oportunidad de acceder a títulos de tierras en donde han habitado durante décadas con sus familias y en donde han desarrollado sus estilos y proyectos de vida.

“La afectación de nosotros es porque no podemos tener la titularidad de la tierra. Muchos de los que la tenemos la tenemos sin título, sin nada. Estamos ahí en el territorio de hecho pero no las tenemos. Lo que sí notamos es que a las multinacionales no les ponen los peros” –Omar de Jesús Pino, campesino de Cordoba

En esta crónica, habitantes de Córdoba nos hablaron de esta problemática y de las dificultades que atraviesan para poder seguir habitando y trabajando en esta subregión.

El Sur De Córdoba, junto con las otras 15 subregiones PDET o Circunscripciones Especiales de Paz participó el 13 de marzo en las elecciones legislativas donde por por primera vez se eligieron a víctimas del conflicto para que representaran, a través de las Curules de Paz en la Cámara de Representantes, a campesinas y campesinos de los municipios más afectados por el conflicto armado.

Al ser estas unas elecciones especiales, fueron muchas las dificultades que tuvieron que vivir los 398 candidatos y candidatas que se postularon para ocupar uno de estos espacios de representación política. 

“Hubo una negligencia porque ninguna aseguradora nos quería emitir la póliza, luego la emiten y a cada candidatos no correspondieren 19 millones de pesos y eso realmente no era nada porque nos tocaba en zonas rurales dispersas” – Elvira del Carmen Negrete, candidata a la Curul de Paz del Sur de Córdoba

Como nos lo contó Elvira, el tema financiero fue una de las dificultades que tuvieron que padecer. 

La ley que creó las Curules de Paz, para los cuatrienios del 2022 al 2026 y del 2026 al 2030, establece que la financiación de las campañas sería totalmente estatal, para evitar inequidad y para asegurar la debida participación de todas las candidaturas, sin embargo, esto no sucedió. 

En muchas de las campañas los dineros de la financiación nunca llegaron o llegaron muy tarde, como en el caso de Elvira del Carmen, que la consignación del dinero se hizo efectiva un día antes de las elecciones. 

En nuestro podcast Historias del Territorio conversamos con Elvira y tres candidatos más del Sur de Córdoba a las Curules de Paz, quienes nos hablaron de cómo fue para ellos participar en estas elecciones y qué lecciones les quedan para la siguiente oportunidad.