Montes de María

En marzo visitamos en la Nueva Área de Reincorporación (NAR) de Ovejas y en El Carmen de Bolívar. Uno de los procesos que pudimos conocer fue el trabajo de mujeres, sobrevivientes del conflicto armado, en el territorio.
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Después de 3 años, volvimos a la subregión de Montes de María para conocer cómo avanza la implementación del Acuerdo de Paz. Entre algunos datos claves de contexto encontramos que:

1. La seguridad territorial se ha deteriorado. A diciembre 2022, la tasa de homicidios en Montes de María era de 26,5 personas por cada 100 mil habitantes, es decir un 26,7% más homicidios respecto al año anterior.

Según la Defensoría, el Clan del Golfo – AGC se ha consolidado y expandido en la subregión Montes de María. Líderes e instituciones reconocen la presencia y control territorial del AGC, lo cual se ha visto representado a través de amenazas, desplazamientos forzados y violencia sexual.

2. Líderes y lideresas manifiestan que la adjudicación y formalización no avanzan de manera adecuada. En Montes de María, se han ingresado 36.629 hectáreas al Fondo de Tierras, de las cuales sólo 429 han sido adjudicadas.

3. Por otro lado, desde el 2017, no se reportan cultivos de hojas de coca o amapola en la subregión. Sin embargo, en 2022 se incautaron 2.046 kg de clorhidrato de cocaína.

Si bien los Montes de María no es una región con presencia de cultivos, sí es una zona estratégica para el tránsito de sustancias y para el microtráfico. Por su geografía, la subregión es considerada como un corredor para el tráfico.

Durante el primer día hicimos seguimiento al proyecto productivo que los reincorporados han venido realizado en el NAR de Ovejas. En 2020 reincorporados de la Unidad Productiva de Damasco contaban con un galpón de 800 gallinas. Sin embargo, se vieron afectados al recibir unas gallinas enfermas.

En la reunión junto a congresistas hicieron un llamado a las autoridades locales de la región para continuar con el proyecto productivo.

Si aún no lo han escuchado, aquí pueden conocer sobre cómo venían avanzando los firmantes de paz en este proyecto:

También, durante la visita pudimos conocer el trabajo que han venido realizando mujeres sobrevivientes del conflicto armado, quienes se han organizado para hacer seguimiento a las medidas con enfoque de género del Acuerdo de Paz. Ellas piden incidencia a través de la participación política como forma de lucha.

“En este proceso hemos crecido… fuimos víctimas del conflicto, fuimos violentadas pero hoy tenemos la capacidad de decir: aquí estamos vivas, aquí estamos luchando”.

Yusnery Guzmán Ruíz, Indígena Zenú, Narrar Para Vivir.

El proceso que han venido realizando se puede encontrar en 15 municipios de la subregión de Montes de María. A través de organizaciones como Fokus y Corporación Humanas han analizado y publicado informes que dan cuenta sobre la realidad que viven estas mujeres.

Desde su labor, lo que las mueve a seguir trabajando por el Acuerdo de Paz, es la inclusión y la reconciliación.